India: Formación de 48 seminaristas
Ayuda a la formación para 48 seminaristas de los CarmelitasEl viaje de los seis Padres Carmelitas europeos que llegaron en febrero de 1657 a la India meridional fue toda una aventura. Durante todo un año habían viajado en dos pequeños grupos. Para tres de ellos, que partieron de Roma, el viaje por poco no acabó en Italia misma, porque su pequeño barco casi se fue a pique al chocar con otra embarcación. Un viaje marítimo eterno los condujo por Sicilia, Malta y Haifa a Aleppo, en la Siria actual. Desde ahí prosiguieron el camino acompañados por una tropa de soldados en una caravana a través del desierto hasta Bagdad. Este trayecto duró dos meses. Por entonces, los viajes eran peligrosos, y los Padres optaron por disfrazarse de turcos. Desde Basora (también en Iraq) volvieron a viajar en barco. Cuando, finalmente, llegaron al sur de la India, a los misioneros les esperaba una gran cantidad de trabajo.
En la actualidad, la orden de los Carmelitas es, junto a la de los Jesuitas, la más numerosa en India. En el seminario mayor de los Carmelitas de Verapoly, que se fundó en 1674, estudian ahora 48 futuros sacerdotes. En 2011 ingresaron veinte nuevos. Algunos de los Padres Carmelitas que han estudiado en este seminario acaban trabajando en zonas difíciles. Así, por ejemplo, también están presentes en Orissa, el Estado indio donde los hindúes fundamentalistas perpetraron auténticos pogromos contra los cristianos en 2007 y 2008. Los graves ataques registrados desde la Navidad de 2007, que culminaron en agosto de 2008, se cobraron unas cien vidas. Además, 50.000 cristianos fueron expulsados y casi 5.000 casas y numerosas iglesias y edificios eclesiales fueron destruidos.
También en Andhra Pradesh, donde mucha gente pertenece a minorías étnicas marginadas por la sociedad, trabajan los Padres Carmelitas. Muchos también ejercen su misión en el extranjero, por ejemplo, en Indonesia, donde los cristianos representan una pequeñísima minoría.
El seminario mayor de Verapoly presta una gran atención a la formación de los jóvenes carmelitas, para que se conviertan en buenos religiosos “por el bien de la Iglesia Universal”, según nos escribe el Provincial, P. Jacob Palliparambil. Por desgracia, falta dinero: el seminario ha podido reunir una parte, pero les faltan 4.800 euros. Para nosotros, destinar 100 euros a la formación de cada seminarista en este año no nos supone un gran esfuerzo, pero para los jóvenes que desean seguir su vocación, es una gran ayuda. Nosotros le hemos prometido al Provincial los 4.800 euros que nos ha pedido.
Este proyecto es un ejemplo de nuestra labor. Su donativo se destinará a este u otro proyecto similar, haciendo así posible la labor pastoral de AIN.
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