Desde entonces, muchos intentos se han realizado para silenciar a este sitio cristiano. Ha sido atacado muchas veces y tres de ellas -por el personal de servicios cibernéticos de la República Islámica- tuvieron éxito. En su último ataque, los agentes dejaron un mensaje en la portada del sitio web, de carácter amenazante, usando palabras ofensivas y severas y criticándolo por difundir noticias sobre los cristianos.
De esta manera la persecución contra los cristianos, junto con el desarrollo de la tecnología, toma una nueva cara. Ahora se puede hablar de una persecución cibernética que violenta los derechos de quienes manifestar su fe públicamente. Aunque esto no solo se presenta en Irán, es uno de los más graves problemas que tienen que afrontar la mayoría de los cristianos de Medio Oriente, de China, algunas regiones de la India e incluso en naciones que tradicionalmente han sido cristianas pero donde se ha desarrollado un laicismo agresivo hacia toda manifestación religiosa.
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