La violación y asesinato de dos adolescentes en el norte de India ha desatado una ola de indignación no sólo por la brutalidad del suceso, sino especialmente por la actuación de la policía en el caso. Cuando la familia de las jóvenes acudió a la comisaría para pedir ayuda, los agentes rechazaron la petición porque, según cuenta el padre de una de las víctimas, se trataba de chicas dalits, la casta más baja de India.
"Cuando fui a la comisaría, lo primero que me preguntó la policía fue mi casta. Cuando les dije cuál era, empezaron a abusar de mí", declaró abatido el padre a la BBC en Badaun, en el estado de Uttar Pradesh, lugar donde aparecieron las dos jóvenes de 14 y 15 años ahorcadas de un árbol, después de haber sido violadas por varios hombres. Las chicas habían sido secuestradas cuando fueron al campo a orinar, ya que en su casa no tenían retrete.
Ante las protestas, los dos agentes que se negaron a actuar han sido suspendidos. Cinco sospechosos han sido arrestados por la violación y el ahorcamiento de las dos primas adolescentes, entre ellos, los dos policías. Algunos se encontraban en la casa donde al parecer estuvieron retenidas las chicas. Otros dos sospechosos siguen sin ser identificados.
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